Igor Rodríguez, es el creador y fundador de Studio Talca. Es talquino, arquitecto de profesión, titulado de la Universidad de Artes, Ciencias y Comunicaciones (UNIACC). Originalmente “Studio Talca” es una empresa de ingeniería y arquitectura, que se ubicaba en otro lugar del centro de #Talca.
En paralelo, Igor lideraba junto a otra persona el proyecto de “Loba”, un Bar Restaurant que funcionó por algunos años en plena calle 3 Poniente. Frente a “Loba” se encontraba una propiedad que llamó la atención de este profesional talquino. Igor pensó en qué podía terminar esa dañada pero bella casona de adobe y llamativas vigas, “dependiendo de quien tomara” o comprara la propiedad. No hubiese sido raro que, sin la iniciativa de Igor, el lugar terminara abandonado por años, o bien, demolida para dar pie a un terreno baldío y/o un estacionamiento. Panorama más que conocido en el casco histórico talquino.
No sería fácil, pero Igor lograría adquirir esta propiedad para implementar ahí su estudio de ingeniería y arquitectura y, además, concretar su anhelo de instalar ahí un “coworking”. Pero antes, vendría lo más complejo: reparar y reconstruir la centenaria estructura.
Igor nos cuenta que comenzaron estas reparaciones en enero del año 2020. Nos confiesa que tuvo el “golpe de suerte” de haber comprado gran parte de los materiales antes de la llega de la pandemia y las considerables alzas de precios en los insumos de construcción. Luego de un año de trabajos, a mediados del año 2021 comenzaba oficialmente a funcionar “Studio Talca”.
Al ingresar, impresiona su estilo industrial, moderno y cálido en sus tres pisos, pero por sobre todo el respeto por la historia y su estructura original. “La apuesta de recuperar esta estructura nunca lo pensé como un negocio (…) esta recuperación fue desde el corazón” nos confiesa Igor, señalando que luego fue tomando forma la idea del coworking, término que se emplea para referirse a una forma de trabajo que permite a profesionales independientes, emprendedores y pymes de diferentes sectores compartir un mismo espacio de trabajo.
Sobre quién es el dueño original de este terreno -que colinda con la Iglesia San Francisco de Talca o conocida también como “Iglesia Pompeya”-, Igor dice no saber con exactitud sobre ellos. Eso sí, está próximo a recibir unas escrituras de títulos antiguas -escritas a mano-, donde se podría acceder a esa información y recuperar la historia de esta propiedad que es parte del sector fundacional de nuestra ciudad.
Studio Talca está constituido por metal, madera, hormigón y adobe, donde se recuperó y preservó la mayor cantidad de materiales de la estructura original, “manteniendo su columna vertebral”. Desde aquí, este emprendimiento local y su innovador concepto busca que los talquinos y talquinas puedan conocer y acceder a este espacio de encuentro y de trabajo.
Cuentan con distintas tarifas y modalidades para el uso de sus instalaciones, las que puedes conocer en https://www.studiotalca.cl/cowork. Además, han realizado capacitaciones, talleres e incluso “after office” durante algunos jueves. Esperan pronto ir avanzando progresivamente en abrir este espacio a la comunidad, a las culturas y a los emprendimientos, y que muchas más personas visiten y conozcan este lugar único en nuestra ciudad.